El martes 01 de agosto, tres bailarinas que trabajaron para Lizzo presentaron una demanda en su contra, en la Corte Superior de Los Ángeles. En la demanda, acusan a la ganadora del Grammy y a la líder de su equipo de baile, de crear un ambiente hostil de trabajo durante los conciertos de su gira de este año.
Las bailarinas aseguran que haber trabajado con la cantante significó estar en una «atmósfera abiertamente sexual», además de vivirse un ambiente tóxico y de bullying. Acusaciones que ponen en cuestión la reputación de la cantante como defensora de la positividad corporal.
Lizzo enfrenta una demanda de 3 ex bailarinas que afirman una amplia gama de irregularidades legales, entre ellas discriminación racial,religiosa, acoso sexual, y ambiente de trabajo hostil😳 pic.twitter.com/W109Hk07mX
— Paralelo.news (@ParaleloMexico) August 2, 2023
Arianna Davis, Crystal Williams y Noelle Rodriguez son las tres bailarinas demandando a Lizzo y su compañía productora.
Davis y Williams obtuvieron su lugar en el equipo de Lizzo cuando compitieron en el reality show de Amazon Prime, Lizzo busca a las Big Girls. Por su lado, Noelle Rodriguez, fue contratada hace dos años para actuar en el video musical de «Rumors«, y posteriormente se quedó como parte del equipo de baile.
De acuerdo con la demanda, Davis y Williams fueron despedidas en primavera de este año. Mientras que Rodriguez renunció poco tiempo después de que despidieran a ambas bailarinas.
¿Qué dice la demanda?
Según el diario The New York Times, quienes obtuvieron acceso a la demanda a través del despacho de abogados de las denunciantes, la demanda indica que las bailarinas estuvieron «expuestas a una atmósfera abiertamente sexual, que permeaba en su lugar de trabajo». Atmósfera que incluía «salidas en donde el foco de atención eran la desnudez y la sexualidad».
En la demanda se incluye también a la compañía productora de Lizzo, Grrrl Big Touring Inc.; y a Shirlene Quigley, la líder del equipo de baile. En ella no se especifica si Lizzo, quien es mencionada por su nombre completo, Melissa Jefferson, estaba al tanto de las denuncias relacionadas a Quigley.
La demanda incluye acusaciones de que las bailarinas fueron»obligadas a soportar un comportamiento sexualmente denigrante» y «presionadas a participar en inquietantes espectáculos sexuales» entre 2021 y 2023.
Entre estas, se menciona que Lizzo presionó a Davis a tocar los senos de una artista en un club nocturno en Ámsterdam. Davis intentó resistirse, pero accedió por temor a que pudiera perjudicar su futuro en el equipo.
También mencionan, también la acusan de avergonzar a Davis por su peso, durante la gira Special Tour. La exbailarina alega que tanto Lizzo como la coreógrafa Tanisha Scott, le preguntaron si «tenía problemas con algo, ya que parecía menos comprometida con su papel en el elenco de baile», se detalla en la demanda.
Y a pesar de que nunca se indicó explícitamente, los cuestionamientos sobre su compromiso «dieron a Davis la impresión de que debía explicar su aumento de peso, y revelar detalles íntimos sobre su vida para mantener su trabajo», aclara el caso.
Ron Zambrano, el abogado de las demantantes, dijo al NYT que Lizzo “avergüenza a sus bailarinas en virtud de su peso y las humilla de formas que no solo son ilegales sino totalmente desmoralizantes”.
Bullying y racismo en el ambiente
Por el lado de las acusaciones hacia Shirlene Quigley, la demanda sostiene que la líder del equipo de baileinculcó sus creencias cristianas a los artistas, y que se burlaba de quienes tenían relaciones sexuales antes del matrimonio.
Además, Quigley está acusada de hablar abiertamente sobre la virginidad de una de las exbailarinas, y de publicar al respecto en las redes sociales.
La denuncia también incluye acusaciones de discriminación racial contra el equipo directivo de la productora Big Grrrl Big Touring, Inc. Pues alega que los miembros negros del grupo de baile fueron «tratados de manera diferente» a otros miembros del equipo.
Davis, Williams y Rodriguez fueron acusadas de ser «perezosas, poco profesionales y de tener malas actitudes». Según la denuncia, estos calificativos se usaban a menudo para «menospreciar y desalentar» a las mujeres negras, y que otras bailarinas no fueron tratadas así.
Y encima, hubo diferencias salariales
Las demandantes añaden que Lizzo y el equipo de la productora no les pagaron de manera justa durante partes de la gira europea de la cantante.
Afirman que se les ofreció solo el 25% de su paga compensatoria semanal durante el tiempo que no actuaron en la gira, mientras que otros artistas recibieron el 50%. Además, de acuerdo a las demandantes, se les pidió que no trabajaran en otros proyectos mientras estaban de gira.
Lizzo, ¿falsa defensora de la positividad corporal e inclusión?
A raíz de hacerse publica la demanda, Lizzo ha recibido mucho backlash, pues además de la naturaleza de las acusaciones, estas actitudes mencionadas van en contra de todo lo que la cantante dice y representa.
Su mensaje de inclusión y positividad corporal se ha visto manchado al conocer la experiencia de estas bailarinas durante su tiempo trabajando con Lizzo.
“La sorprendente naturaleza del trato de Lizzo y su equipo a sus artistas parece ir en contra de todo lo que Lizzo representa en público”, declaró el abogado de las demandantes.
La ganadora del Grammy ha celebrado la diversidad en todas sus formas desde que comenzó a obtener popularidad y reconocimiento en la industria. Sus canciones son himnos de amor propio y empoderamiento, por lo que enterarnos de que avergonzó a una bailarina por su peso sorprende mucho.
@hellotefi