El cáncer de mama es la sexta causa de fallecimiento entre mujeres mexicanas de 30 a 39 años, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Además del impacto en la salud, esta enfermedad puede representar un alto costo económico: hasta 34.2 millones de pesos, de acuerdo con GNP Seguros, el monto más alto pagado por la aseguradora en un solo caso.
Una enfermedad de alto riesgo y gran costo
“El cáncer de mama es una enfermedad caracterizada por el crecimiento anormal y descontrolado de células en el tejido mamario”, explicó Carmina Villavicencio, subdirectora de Operaciones de Médica Móvil.
De acuerdo con GNP, una de cada 20 mujeres en el mundo será diagnosticada con esta enfermedad durante 2025. En México, las cifras son alarmantes: el Inegi reportó 8 mil 450 defunciones por cáncer de mama en 2024.
Este tipo de cáncer ocupa el primer lugar de fallecimientos en mujeres de entre 60 y 74 años, el tercer lugar en el grupo de 40 a 49, y el sexto lugar en el rango de 30 a 39 años.
Diagnóstico tardío, un reto en México
Especialistas de la Universidad de Guadalajara advierten que el 75% de las mujeres mexicanas buscan atención médica cuando el cáncer ya está en etapas avanzadas, lo que reduce significativamente las posibilidades de recuperación.
Costos y atención médica en aumento
Durante 2024, GNP Seguros atendió cerca de 4 mil casos de cáncer de mama dentro de su cartera de Gastos Médicos Mayores, tanto individuales como colectivos, con un desembolso superior a mil 400 millones de pesos.
Hasta agosto de 2025, la aseguradora ha registrado más de 3 mil 500 casos y ha superado los mil millones de pesos en pagos.
Aunque esta enfermedad es más común en mujeres, Villavicencio recordó que también puede afectar a los hombres, quienes representan alrededor del 1% de los diagnósticos. En ese mismo periodo, GNP atendió 63 casos de cáncer de mama masculino.
La detección temprana salva vidas
En el marco del Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Mama, GNP Seguros reiteró la importancia de la detección oportuna como la herramienta más efectiva para reducir riesgos y mejorar el pronóstico de la enfermedad.
