El rock alternativo de los años 2000s tuvo su auge con bandas como Green Day, Blink-182, Sum41, Korn, Limp Bizkit, entre muchos otros. Dentro de este movimiento, una de las bandas más reconocidas por su legado musical es Linkin Park, quien debutó con su primer álbum Hybrid Theory en el año 2000. Alcanzaron un éxito descomunalmente rápido para una banda desconocida. Para 2001, el álbum había vendido 4,8 millones de copias en Estados Unidos, convirtiéndolo en el álbum más vendido del año y se estimó que el álbum continuó vendiendo 100,000 copias por semana a principios de 2002. Al día de hoy continúan siendo una de las bandas más influyentes de este siglo.
La historia de Linkin Park ha estado marcada por su carácter único y a la vez representativo de la época y cultura en la que nacieron y se desarrollaron. Además de ser conocidos por su fusión original del metal, el hip-hop y el rap, una de las características más representativas de su música fueron sus letras crudas, tortuosas y a la vez poéticas. A pesar de que a lo largo de su trayectoria comenzaron a incorporar otros estilos, uno de los factores permanentes en su identidad fue que, sin importar su dirección, el dolor y la catarsis permanecieron como la temática más importante de sus canciones.
Y no es posible pensar en las características más emblemáticas de Linkin Park sin pensar en el incomparable talento de su vocalista principal, Chester Bennington, cuya vida fue marcada tanto por su increíble capacidad vocal como por su lucha con la salud mental, la cual terminó por llevarlo a quitarse la vida en julio de 2017.
https://t.co/216dQRaZuc #MakeChesterProud #320ChangesDirection pic.twitter.com/v9yA6RB9XU
— LINKIN PARK (@linkinpark) July 20, 2018
La voz de Chester Bennington ha sido la voz más emblemática de su generación, colocándolo a la misma altura que cantantes como Freddie Mercury y Whitney Houston. Lo más impresionante de la voz de Chester es que su capacidad vocal le permitía pasar de los tonos sumamente dulces a los gritos en cuestión de segundos. Lograba capturar la crudeza en todas sus formas, desde la angustia y la vulnerabilidad hasta la ira y la desesperación.
A lo largo de su carrera, las letras de Linkin Park fueron marcadas por un sentido de incomprensión, enojo y desolación, que a su vez suscribió a una línea que seguían otras bandas de metal y rock alternativo. Y a pesar de esconderse tras una coraza de riffs y melodías explosivas, las letras de Linkin Park parecían ser, en un sinfín de ocasiones, un llamado de ayuda.
Canciones como Crawling (2000), Somewhere I belong (2003), y Leave out all the Rest (2007) fueron enormes éxitos comerciales que a su vez expresan señales de alerta con verdaderos sentimientos de desesperanza y derrota. Es aterrador y a la vez enternecedor como la letra de Leave out all the Rest sacada de contexto podría fácilmente ser una carta suicida: When my time comes/Forget the wrong that I’ve done/ Help me leave behind some reasons to be missed/ And don’t resent me/ And when you’re feeling empty/ Keep me in your memory/Leave out all the rest
La reverberación del rock en la angustia
Millones de personas se sintieron identificadas por las letras de Linkin Park a lo largo de los años. Toda una generación fue marcada por canciones como In the End y Numb. Y quizá eso se deba al carácter universal de la angustia de la que hablan sus letras, utilizando frecuentemente el pronombre neutro “you” (de manera que podrían ser dirigidas hacia una pareja, un familiar o la expectativa social en general) y narrativas que denotaban un sentido de insuficiencia y aflicción. Al ver estas letras en retrospectiva -incluyendo el mensaje esperanzador de la canción One more light (que dio título a su último álbum en 2017 y cuyo tour nunca se llevó a cabo debido la muerte de Chester)- el sentido de alerta es claro. Sin embargo, quizá las nociones del estigma alrededor de la salud mental, el rock alternativo y, principalmente, las ideas tradicionales de masculinidad no permitieron verlas de esa manera durante su época.
Y es que el rock pareció ser por muchos años uno de los pocos espacios seguros y permitidos para que los hombres pudieran hablar sobre sus problemas e inconformidades. Es por eso que temáticas como el no ser suficiente o sentirse solo son tan comunes a tantas canciones como Behind Blue Eyes de Limp Bizkit, Predictable de Good Charlotte, Pieces de Sum41, Last Resort de Papa Roach, Adam’s Song de Blink-182, I’m Not Okay de My Chemical Romance, por mencionar algunas.
Y de alguna manera, a pesar de que el mensaje de desesperación era claro (y se hacía un esfuerzo por expresarlo de manera creativa) parecía que el acto de expresarlo temía mostrar vulnerabilidad, al diluirse entre tatuajes, piercings, vestimenta negra y riffs poderosos. Quizá la coraza y el estigma nunca nos permitieron ver más allá.
Datos de la OMS indican que en 2019, 1 de cada 8 personas, o 970 millones de personas en todo el mundo, vivían con algún trastorno mental como ansiedad y/o depresión. Si bien las mujeres tienen el doble de probabilidades de que se les diagnostique depresión, los hombres tienen cuatro veces más probabilidades de cometer suicidio. Esto sugiere que los hombres tienen menos probabilidades de buscar ayuda y apoyo cuando se sienten ansiosos, estresados ??y deprimidos. La tendencia a consumir alcohol para sobrellevar la situación puede empeorar estos síntomas con el tiempo.
La historia de Chester Bennington es un trágico ejemplo de lo insoportable que puede ser para los hombres lidiar con las exigencias de su propia vida y sus propios traumas (que en el caso del cantante eran muy profundos) al mismo tiempo que las nociones tradicionales de la masculinidad les otorgan una oferta paupérrima de maneras de escapar o desahogarse. La historia de la presencia masculina en el rock alternativo de los 2000s deja ver la extrema necesidad que los hombres siempre han tenido por un espacio dónde vertir sus vulnerabilidades, preocupaciones y sensaciones de insuficiencia en un sentido de comunidad y camaradería.
Y aunque hemos avanzado como sociedad en temas de salud mental y alzando la voz sobre lo restrictivas que son las nociones impuestas por el patriarcado (tanto para hombres como para mujeres) la realidad es que millones de hombres sufren en silencio debido al estigma que existe en torno a su vulnerabilidad. La depresión es un problema real, profundo y muchas veces silencioso. Es por eso que es necesario alzar la voz de manera profusa sobre su existencia y poner al alcance de todos los recursos para tratarla. Nuestra existencia depende, literalmente, de ello.
También te puede interesar: El feminicidio de la atleta olímpica ugandesa Rebecca Cheptegei: misoginia y voz pasiva
Si tú o alguien que conoces necesita ayuda puedes comunicarte en la línea de prevención del suicidio al *0311 o al 55 5658 1111 y solicitar el servicio psicológico, te atendemos telefónicamente y vía chat las 24 horas, los 365 días del año.














