Kevin Spacey regresa a los reflectores. En todos los sentidos.
Esta semana su nombre está resonando en algunas esferas. Y es que el lunes HBO estrenó el documental Desenmascarando a Spacey. Mientras que la semana pasada, Variety publicó una entrevista con Paul Schrader, en la que el aclamado guionista y director expresó sus deseos de trabajar con Spacey en una biopic sobre Frank Sinatra.
Y finalmente, quizás lo menos sonado, es que Kevin Spacey enfrentará otro juicio civil en el Reino Unido el próximo año. También por acusaciones de abuso.
El actor de 64 años lleva varios años en juicios y litigaciones, debido a las denuncias que ha recibido por abuso y acoso sexual, que comenzaron a surgir en 2017, el mero auge de la era #metoo.
Sin embargo, aunque de pronto resurge su nombre en medios de comunicación y redes, el caso de Spacey no tiene la exposición que han tenido muchos otros casos de esta era, como Harvey Weinstein, Bill Cosby, Louis C.K., y Matt Lauer.
Y aunque no tiene acusaciones de violación, como Weinstein y Cosby, los efectos del trauma ocasionados en las víctimas han tenido un impacto fuerte en sus vidas.
Pero primero recapitulemos las acusaciones
Todo empezó en 2017, cuando el actor Anthony Rapp acusó a Kevin Spacey de abuso sexual. El hecho sucedió en 1986, cuando Rapp tenía 14 y Spacey 26, en una fiesta en el departamento del actor.
El ganador del Oscar negó todo, obviamente, y aseguró no recordar lo que había pasado hace 30 años. Sin embargo, por las dudas, se disculpó con Rapp si su comportamiento había sido inapropiado.
Ese mismo año, Roberto Cavazos acusó a Spacey de actitud acosadora. El actor mexicano denunció que cuando Kevin Spacey dirigía el teatro Old Vic en Londres, él y otros actores jóvenes fueron víctimas de acoso.
Poco a poco, comenzaron a salir más y más historias denunciando abuso y acoso por parte del ganador del Oscar. Incluidas denuncias de actores, empleados y ex empleados de House of Cards (serie que le mereció varias nominaciones al Emmy por mejor actor principal).
Otro de los denunciantes fue Harry Dreyfuss, hijo del actor Richard Dreyfuss. El actor contó que Kevin lo había manoseado, cuando Dreyfuss tenía apenas 18 años, mientras acompañaba a su papá a un set.
Más tarde, en 2019, un masajista inició una demanda judicial por agresión sexual, denunciando que Kevin Spacey había abusado de él durante una sesión de masajes. Aunque esta denuncia nunca llegó a juicio ya que el masajista murió poco después.
Lo mismo pasó con el escritor noruego Ari Behn. En 2019 el ex esposo de la princesa Martha Louise de Noruega denunció al actor por agresión sexual. De acuerdo al denunciante, lo ocurrido había pasado durante una ceremonia de los Premios Nobel en Oslo unos 10 años atrás.
Sin embargo tampoco hubo juicio. Behn murió por suicidio poco después de la denuncia.
Finalmente, este lunes 13 de mayo se estrenó un documental, Desenmascarando a Spacey, con relatos de 10 hombres que cuentan su experiencia con el actor. Experiencias nunca antes reveladas.
He estado viendo el documental “Kevin Spacey: Al descubierto (2024)”, el documental sobre los abusos de poder del actor, recientemente estrenado en HBO Max.
Les voy a contar algunas cosas de él Vamos ??? pic.twitter.com/IZj0x2ekfM
— Cinefilia Cult (@cinefiliacult) May 15, 2024
Los juicios de Kevin Spacey
En 2019, Kevin Spacey enfrentó un cargo por agresión sexual en un tribunal de Massachusetts. En esa ocasión, un joven de 18 años acusó a Spacey por una agresión en un bar en 2016, en Nantucket. Sin embargo, el tribunal de esa ciudad desestimó el caso porque el joven había mentido sobre su edad, entre otros argumentos.
El caso de Rapp llegó finalmente en 2022 a los juzgados de Nueva York, a través de una demanda civil presentada por el actor de teatro. Sin embargo, después de 3 semanas de testimonios, el jurado encontró que Rapp no había probado su caso. Por lo que el juicio fue desestimado.
Mientras que en 2023, Kevin Spacey compareció ante un juzgado en Inglaterra por 9 cargos de agresión sexual, agresión indecente y abuso sexual. Siete de los cargos eran por agresión sexual contra cuatro hombres, entre 2001 y 2013. Spacey fue declarado no culpable de todos los cargos, después de un mes de juicio y 12 horas de deliberación por parte del jurado.
Uno de los denunciantes de ese juicio, que permanece en anonimato por decisión del tribunal, presentó además una demanda civil por agresión sexual, alegando daños psicológicos y financieros.
La demanda fue procesada este año, después de haber terminado el juicio del caso criminal. Y por un momento el juez había sentenció en favor del denunciante, ya que los abogados del actor estadounidense no presentaron su defensa a tiempo.
Sin embargo, la semana pasada el juez anuló esa sentencia, calificándola como error, por lo que se espera que el juicio se lleve a cabo en 2025. Así que los enfrentamientos de Spacey con la justicia no han terminado.
Y ojo, es muy importante destacar que no fue declarado inocente, fue declarado no culpable, que no es lo mismo. Una significa que no se cometió el crimen. No culpable significa que no hubo pruebas suficientes para determinar si sí hubo abuso o acoso.
Pero Tribunal de Arbitraje sí lo hace pagar
Los juicios mediáticos en los tribunales de Nueva York y Londres no han sido la única vez que Spacey se enfrenta a cargos de conducta inapropiada. Media Rights Capital, la casa productora detrás de House of Cards, demandó a Spacey por daños financieros.
Después de su despido de la serie de Netflix, MCR acusó al actor que interpretó a Frank Underwood por daños y costos; además por el eventual incumplimiento de sus acuerdos de actuación y producción ejecutiva.
Y es que la productora perdió una muy buena cantdad de dinero, ya que ya se tenía contenido de la sexta temporada listo para el estreno. Por lo que la producción tuvo que desechar todo ese material, y reescribir la temporada completa a contratiempo. Recortándola, además, de 13 a 8 episodios.
Además, señalaron que el ex protagonista violó la política contra el acoso que la compañía tenía. Así fue como MCR buscó compensación, y en 2020 interpuso una demanda contra Spacey, en la que señalaban que debía pagar 29.5 millones de dólares por daños compensatorios, 1.2 millones por honorarios de abogados, y más de 235 mil dólares en otros costos para la producción.
Después de una investigación independiente, en el que varios empleados, ex empleados y actores testificaron en contra del actor, alegando conductas inapropiadas, el Tribunal de Arbitraje encontró que Spacey tuvo un patrón de conductas inapropiadas que se extendieron durante todas las temporadas del programa.
Y aunque no declararon que Spacey haya hecho nada criminal, sí encontraron que había violado la política de acoso, por lo que era responsable económicamente.
Como era de esperarse, el acusado apeló la sentencia, a finales del 2021. Sin embargo, la solicitud fue denegada por el juez Mel Recana de la Corte Superior de los Ángeles, quien confirmó la sanción.
¿Por qué Kevin Spacey no es tendencia?
A diferencia de varios de los hombres acusados y juzgados en la era post #metoo, de Kevin Spacey poco se habla. O poco se escucha. Mientras que la noticia de la anulación del juicio contra Harvey Weinstein da la vuelta al mundo, generando indignación, los múltiples juicios de Spacey pasan desapercibido.
¿Será que el culto a la personalidad nos hace hacernos de la vista gorda? ¿O será que la homofobia nos hace darle menos valor a las víctimas del actor?
No es por falta de interés ante Spacey, siendo uno de los que muchos consideraban, o consideran aún, de los mejores actores de Hollywood. Como con Johnny Depp, la veneración a ciertas celebridades nos hace “perdonar” más fácil a actores que nos han dado personajes entrañables (sí, aunque esos personajes sean villanos).
Pero por otro lado, y habiendo visto Baby Reindeer recientemente, no puedo dejar de pensar en que no estamos volteando a ver porque son hombres los que lo acusan.
Y es que en el sistema patriarcal, si a una mujer no la escuchan cuando acusa a un hombre de abuso o acoso, resulta que a un hombre menos. Por más extraño que suene, pero es la realidad. (Y una de las maneras sobre cómo el patriarcado afecta también a los hombres).
Tristemente, la violencia sexual contra los hombres continúa siendo un tabú del que pocos hablamos.
