Los símbolos del show de Kendrick Lamar

Después del SuperBowl el pasado domingo, en muchos círculos, el show de medio tiempo ha dado más de qué hablar que incluso el propio partido.

Esto se debe a que el espectáculo, protagonizado por el rapero Kendrick Lamar, fue realmente singular. Esto se debe a que fue subversivo en sus símbolos pero discreto en la superficie. De manera que para entender el significado real de su show es necesario tomarse el tiempo de fijarse en los mensajes ocultos durante la presentación.

 

El protagonista ideal

Es importante recordar que en el pasado, Kendrick ha aprovechado las oportunidades que se le presentan en los grandes escenarios para abordar temas polémicos y transmitir sus propias inquietudes políticas. Ha invocado la brutalidad policial en los premios BET y el encarcelamiento masivo (por no mencionar su desilusión general con Estados Unidos) en los Grammy. 

 

De todos los artistas de hip-hop que podrían haber honrado el escenario del espectáculo de medio tiempo, parecía que Lamar había sido elegido por su combinación de talento para el espectáculo y su capacidad para generar conversación. Dicho esto, la reciente reelección de Donald Trump (y la sorprendente asistencia al Super Bowl, la primera para un presidente en funciones) parecía el escenario ideal para las imágenes provocativas características de Lamar y el lado político de su catálogo, como su canción de 2015 “Alright”, que fue un himno del movimiento Black Lives Matter.

 

Lamar, que ha ganado un premio Pulitzer de música, es conocido por su capacidad para contar historias, y su actuación en el Caesars Superdome buscó contar una historia sobre los afroamericanos y su lugar en la historia de Estados Unidos.

 

Mientras los fanáticos reunidos en Nueva Orleans rapeaban al ritmo de éxitos como «Humble» y la canción de insultos ganadora del Grammy «Not Like Us», la actuación (conformada únicamente de personas negras) de Lamar estuvo llena de referencias políticas y a la historia negra.

Puedes ver el show completo aquí. Aquí te presentamos algunos de los símbolos escondidos en la presentación de Kendrick:

El tío Sam

Antes de que Lamar diera inicio a su actuación, la primera persona que vimos no fue otro que Samuel L. Jackson. El legendario actor estaba vestido como el Tío Sam, con un traje de estrellas y rayas. Dio la bienvenida al público al “gran juego americano” y sirvió como maestro de ceremonias ayudando a que el espectáculo avanzara. 

 

En un momento dado, califica el espectáculo de “demasiado ruidoso, demasiado imprudente, demasiado gueto”, mostrando una relación polémica entre Lamar y el Tío Sam como figura del idealismo americano. El Tío Sam también lleva la cuenta a medida que avanza el espectáculo, restando “una vida” cuando Lamar se une a sus “amigos” en el escenario.

 

Esto podría ser una alegoría a la brutalidad histórica de los policías contra las personas negras, y lo poco que aparentemente importa el “deducir” una vida negra.

 

La revolución

 

Al principio de su actuación, Lamar habla de “la revolución” y le dice al público; “The revolution is about to be televised; You picked the right time but the wrong guy”.

 

La frase hacía referencia al poema de Gil Scott-Heron de 1971 “La revolución no será televisada”, que sostiene que el cambio no proviene de las corporaciones sino de los individuos, y que los medios no mostrarán la violencia del racismo.

 

Pero la referencia de Lamar al “tipo equivocado”, según especularon algunos usuarios de las redes sociales, fue un ataque directo al presidente Trump, que estuvo presente el domingo.

 

Aunque Trump se ganó el apoyo de varios artistas destacados de hip-hop, entre ellos Lil Wayne y Kodak Black, Lamar es conocido por criticar al presidente, incluso en sus canciones “The Heart Part 4” y “XXX”.

 

Al mismo tiempo, Kendrick decidió cerrar el show con la canción «tv off» en la que cambió la letra diciendo «turn this tv off» lo que podría significarse como hacer énfasis en las distracciones que nos distraen de lo importante que sucede en la sociedad, como las redes sociales o la misma televisión.

Encarcelamiento masivo

 

El escenario de la actuación de Lamar transmitió su propio mensaje. Mientras el rapero y sus bailarines, todos negros, giraban por el campo, pronto quedó claro que estaban actuando en el patio de una prisión.

 

El escenario fue diseñado para resaltar el problema del encarcelamiento masivo y las disparidades raciales de quienes están tras las rejas. Los estadounidenses negros son encarcelados a tasas mucho más altas que los estadounidenses blancos, incluso por los mismos delitos.

 

La bandera estadounidense

 

Los bailarines de apoyo de Lamar iban vestidos de rojo, blanco y azul, pero si el mensaje de la bandera no era lo suficientemente claro, se unieron durante la canción “Humble” para formar la imagen explícitamente.

 

En un momento durante la formación, todos los bailarines se inclinaron hacia adelante, levantando la espalda en el aire. Muchos en las redes sociales teorizaron que el movimiento tenía como objetivo indicar cómo Estados Unidos se construyó sobre las espaldas de los afroamericanos durante la esclavitud.

 

El show de Kendrick Lamar probó ser una enorme muestra de resistencia e indignación contra el establishment en nada más y nada menos que el escenario más comercial del mundo, en una de las ligas deportivas más conservadoras de Estados Unidos y en frente del presidente cuyo régimen criticaba. Y lo más impresionante es que, si no nos fijamos bien, esto podría incluso parecer discreto. Pero ciertamente no lo fue.

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